martes, 24 de septiembre de 2013

Misterios Aztecas

La secuencia presentada en los códices era vista como una narración básica, hasta podría decirse que incompleta, ya que debía enriquecerse con la tradición oral de los más sabios.

Códice Zouche-Nuttall, manuscrito pictórico mexicano de origen prehispanico, perteneciente a la cultura mixteca. Esta conformado por 16 piezas de piel de venado tratada unidas a las extremos que le dan una longitud de 11,41 mts.
El lenguaje pictográfico se vale de un recurso: la normalización de las posturas y los gestos. Los rostros, brazos y piernas se ubican de perfil mientras que el torso se ubica de frente.
Las distinciones entre el hombre y la mujer se establecen con la vestimenta. 
El hombre suele estar cubierto por un braguero y la mujer con una falta, a veces el torso desnudo y un tocado. En cuanto al color del cuerpo el hombre suele ser color café,mientras que la mujer de color amarillo.

Escenas de toma de cautivos, abundan en los códices mesoamericanos. 
Algunos llevan las manos atadas a la pared, otros están atados con cuerdas.
La figura humana esta hecha en una escala mayor que la arquitectura de las montañas, la relación que existe entre los objetos y las figuras es conceptual.
Antecedentes de los códices son los bajorrelieves en piedra, como también
 las pinturas en cerámica y en murales. Las figuras están 
representadas en dos escalas diferentes: El hombre que esta 
dentro de una cueva es casi tan grande como la montaña.
En el período clásico aparecen representaciones de casas y templos, como en el caso de las pinturas murales en Tetitlia, Teotihuacán.
En el Monte Albán se encontraron imágenes en las que se observan figuras humanas en acción, como también signos y números para establecer fechas.
El códice Zouche-Nuttall es uno de los seis códices mixtecos considerados de tradición prehispánica que sobrevivieron a la Conquista de México.